Al margen
Rafael Barrett
Malpaso
Barcelona, 2021
237 páginas
Rafael Barret (Torrelavega,
1876 – Arcachón, Francia, 1910) forma parte de esos divulgadores, o periodistas
o escritores, tal vez cronistas, que siguen demostrando que no se trata tanto
de un juego de equilibrio, entre la denuncia y el entusiasmo, como de una clara
toma de partido a favor del segundo. Para que crezcan las amapolas en el
estercolero, será necesario abonarlo. Con un estilo tan pasional como el de
Julio Camba, por ejemplo, enfoca cuestiones de poder y de justicia. Barret
parece considerar que no existe verdadero poder sin justicia social, sin que se
permita el bienestar individual, que no consiste tanto en la posesión de lo
codiciado como en desalojar la codicia de los pulmones. Es necesaria esa bondad
para eludir la tiranía: “No hay verdadero amor a los hombres donde no hay
cólera contra la estúpida injusticia de los dolores humanos. Entre seminaristas
se emparentará tal vez la mansedumbre de Pellico con la del cordero pascual. Si
embargo Jesús azotó a los mercaderes, maldijo a los ricos y a los poderosos, y
llamó a los fariseos raza de víboras”.
“La humanidad se parecerá al hombre”.
La impresión que da es la
de estar pontificando. Sin embargo, a medida que nos adentramos en los artículos
que aquí se recopilan, nos damos cuentas de que su afán es sembrar dudas.
Barret nos obliga a cambiar de dirección, a pensar de forma divergente cuando
sentimos la tentación de guiarnos por tópicos, por ideas acomodadas que nos
facilitan flotar en el mundo color de rata. Pero de lo que se trata no es de
flotar, es de navegar. De ahí que sus mejores expresiones surjan cuando
abandona temas de política institucional y se entregue a la naturaleza:
entonces descubrimos que en este hombre el lirismo se imponía a cualquier clase
de rencor y nos damos cuenta de que ser valiente y ser sincero son sinónimos.
Por eso agradecemos tanto la recuperación de su obra.